Los Mundiales nos han regalado partidos épicos. Entre ellos se encuentran las semifinales y las finales que se definieron por penales. ¿Qué puede haber que genera más tensión que partidos definitorios decididos por la pena máxima?
Las definiciones por penales se aprobaron como método de desempate para el Mundial de 1978, pero fueron utilizados recién en 1982, cuando Alemania se enfrentó a Francia en la semifinales del torneo celebrado en tierras españolas.
Los germanos vencieron 5-4 a los franceses tras igualar 3-3 en el tiempo reglamentario. Sin embargo, en la final cayeron ante Italia.
Italia 1990 vio dos definiciones semifinalistas de infarto, ya que los encuentros entre Argentina e Italia y Alemania e Inglaterra se definieron por la vía de los doce pasos.
Los comandados por Diego Maradona vencieron a los italianos por 4-3 tras igualar 1-1 en tiempo reglamentario; al tiempo que los alemanes superaron también por 4-3 a los ingleses luego de empatar en 1 gol. En la final, Alemania vencería por 1-0 a Argentina.
La siguiente semifinal definida por penales en la historia de los Mundiales se dio en Francia 1998, entre Brasil y Holanda. Los sudamericanos vencieron a los europeos por 4-2 tras empatar 1-1 en el tiempo reglamentario. Brasil sería, luego, campeón.
Para disfrutar de los nervios de otra semifinal por penales se tuvo que esperar a Brasil 2014. Los protagonistas fueron Argentina y Holanda, que tras un aguerrido 0-0 en 120 minutos, definieron el encuentro desde los doce pasos; los argentinos vencieron por 4-2. En la final, caerían ante Alemania por 0-1.
Solo dos finales se definieron por penales en la historia de los Mundiales
Estados Unidos 1994 y Alemania 2006 son los dos únicos mundiales en la historia que se definieron desde la vía del punto del penal.
Si hay partidos que no son para nerviosos son finales que tienen penales, pero les pasó a hinchas brasileños, franceses e italianos por duplicado.
En 1994, Brasil venció a Italia 3 a 2 en los penales, luego de una de las finales más aburridas de todos los tiempos que terminó 0-0.
En Alemania 2006 la cosa fue distinta para los italianos, que vencieron a Francia por 5-3 en los penales. El encuentro había terminado 1-1 y fue en el que ocurrió el inolvidable cabezazo de Zinedine Zidane a Marco Materazzi.