Nombre del autor: Santiago Velasco
Santiago Velasco es un analista y especialista en juegos de cartas, de mesa y loterías. Nacido el 1 de julio de 1990 en la ciudad de Lima, Perú, el joven jugador es graduado en Ingeniería Civil y tiene un magíster en Mercado Financiero y de Capitales.
Además de trabajar como ingeniero e inversor, Santiago gusta de dedicar su tiempo a una de las cosas que más le apasionan: los juegos de apuestas. Para él, el mercado financiero, con sus bolsas de valores y el mercado de cambio, tiene mucho en común con los juegos de apuestas, especialmente en el área de derivados: “Puedes enriquecerte de la noche a la mañana, y por eso es tan atractivo”, confiesa.
El debut en los juegos
Santiago nació en Perú, pero vive en Brasil desde los cuatro años de edad, cuando sus padres emigraron y se establecieron en la ciudad de Curitiba. Cuando estaba a punto de cumplir 18 años, viajó nuevamente a Perú para visitar a sus abuelos y, por casualidad, consiguió un empleo en un casino. “Necesitaban a alguien que supiera hablar, además de español, inglés y portugués, y acepté el trabajo sin pensarlo mucho”.
Un dealer muy joven
Velasco comenzó su trabajo en el casino, inicialmente como ayudante, retirando vasos sucios, anotando y entregando pedidos, pero, después de algunos meses, consiguió el puesto de dealer en una mesa de póker.
“Hice amistad con el gerente y, en broma, me llamaba 'Mister', por haber vivido fuera de Perú”. También cuenta: “Sabiendo que me gustaban los juegos, me permitió ser crupier en una mesa de póker de apuestas mínimas de un dólar”. Fue allí, del otro lado de la mesa, donde Velasco comenzó a entender que el juego era mucho más que suerte: “Vi a muchos viejos zorros con mala suerte en las cartas llevarse el dinero de jóvenes inexpertos pero afortunados”.
La consagración
El viejo gerente, hasta hoy su amigo, no se arrepintió de darle una oportunidad a Velasco y, al ver que su trabajo era impecable, lo llevó a una mesa de blackjack con apuestas mínimas de 50 dólares. “Puede que no lo parezca, pero en el póker la función del dealer es puramente administrativa, ya que los apostadores juegan entre sí. Pero en el blackjack, o incluso en el baccarat, el cliente apuesta contra la casa, y por eso es necesario que el crupier tenga mucha responsabilidad”, explica Velasco.
A pesar de haber tenido éxito como dealer y de la insistente solicitud del señor Ramón, el gerente, para que se quedara en el casino, Velasco prefirió despedirse de la casa y de sus amigos del salón para estar del otro lado de la mesa. Con el conocimiento adquirido como dealer durante muchos meses en salas de apuestas, y junto con su perfil de inversor financiero, Velasco es un gran especialista cuando se trata de juegos de cartas, de mesa y loterías.